lunes, 12 de enero de 2015
Falsificaciones - Marco Denevi
Entre los relatos, destacan "El primer cuento de Kafka", sobre un testigo que se demora infinitamente en un juzgado hasta que termina por reemplazar al juez; "el precursor de Cervantes" sobre una obra literaria, anterior al Quijote, en la que Dulcinea, loca, delira con un hidalgo imaginario; "el hormiguero", alegoría en la que las hormigas descubren el vegetal sintético y luego se aíslan del resto de la Naturaleza; "Una carta", donde se usa el recurso de una carta del lector para exponer la hipótesis de que Lázaro no pudo volver a morir tras ser resucitado; "La cicatriz", historia de un muchacho del siglo XVI que suma respeto y fama gracias a una falsa cicatriz que le cruza la cara, copiada de un condottiero; "El Dios de las moscas", doble una religión de las moscas, en la que el paraíso es un trozo de carroña y el infierno, un lugar pulcro e iluminado.
A chuva Pasmada - Mia Couto
Un día, simplemente porque sí, la lluvia deja de caer. Queda el agua suspendida en el aire, en una especie de neblina de gotas.
No se sabe si es por causa de la fábrica que no deja de lanzar humo, si es por la tía solterona que estácausando una maldición, o si es el abuelo que se está resecando.
Todos creen ser los culpables.
La madre decide ir a la fábrica y la tía quiere fugar, pero nada de esto es el problema.
El abuelo confirma: es la abuela, la descendiente de quien creó el río que cruza el pueblo, que viene a buscarlo. ¿Que culpa tengo yo si no puedo morir? le dice al nieto.
Finalmente, nieto y padre llevan la barca hasta el lecho seco del río y deositan dentro al abuelo. Entonces la lluvia se despierta y comienza a caer.
Todos acuden al río para festejar y el protagonista ve, en la bruma, alejarse la canoa
del abuelo lentamente en la corriente.
No se sabe si es por causa de la fábrica que no deja de lanzar humo, si es por la tía solterona que estácausando una maldición, o si es el abuelo que se está resecando.
Todos creen ser los culpables.
La madre decide ir a la fábrica y la tía quiere fugar, pero nada de esto es el problema.
El abuelo confirma: es la abuela, la descendiente de quien creó el río que cruza el pueblo, que viene a buscarlo. ¿Que culpa tengo yo si no puedo morir? le dice al nieto.
Finalmente, nieto y padre llevan la barca hasta el lecho seco del río y deositan dentro al abuelo. Entonces la lluvia se despierta y comienza a caer.
Todos acuden al río para festejar y el protagonista ve, en la bruma, alejarse la canoa
del abuelo lentamente en la corriente.
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